Las forestales como principales responsables de la sequía en territorio Mapuche
Por Equipo Mapuche
WALLMAPU/ Siembras completamente destruidas, animales muertos y comunidades sin agua para el consumo humano, Ya para nadie es noticia que en las comunidades mapuches se está viviendo una situación desesperante debido a la grave sequía que afecta al territorio del wallmapu . Sin embargo, hay un elemento importante que está ausente en la información que se brinda a la población : la incidencia de la forestación en el agravamiento de la sequía.
Mientras el Estado responsabiliza -quizá con razón- frente al anunciado cambio climático, pero nada se dice de la responsabilidad del Estado en la promoción de la plantación de miles y miles de hectáreas de árboles de rápido crecimiento (eucaliptos y pinos), cuyo alto rendimiento se basa en un enorme consumo de agua.
Cabe precisar que el agua es un elemento esencial que ha sido manejado por cientos de generaciones de familias Mapuche, en especial para crear, ampliar y conservar zonas de interés ecológico,espiritual, medicinal productivo y astronómico.
HABLEMOS DEL EUCALIPTO
(Eucaliptus globulus, Eucaliptus Nitens, Eucaliptus sp.)
Se estima que un eucalipto de 3 años de vida consume por día unos 20 litros de agua. Es decir, que si cada hectárea contiene en promedio unos 1000 árboles, ello implica un consumo diario de 20.000 litros, que traducidos a metros cúbicos, significa 20m3 por hectárea y por día. Multiplicando dicha cifra por 800.000 hectáreas, las plantaciones de todo el país estarían consumiendo diariamente 16 millones de metros cúbicos de agua. y cuando ya hablamos de forestaciones de por lo menos 20 años de ser plantado, se dice que cada planta de Eucalipto consume 200 litros por día, ademas debemos saber que una planta de Eucalipto tiene una capacidad de succionar agua hasta 70 metros de profundidad.
Camiones aljibes repartiendo agua a comunidades Mapuche
Durante estos últimos años varios camiones aljibes de diferentes municipios de la Región de la Araucanía se dirigen a comunidades Mapuche para ir entregando agua de casa en casa. Este simple acto, que a ojos de sectores de gobierno y empresarios es una responsable forma de ir en ayuda de las familias mapuche, esconde una de los más negativos cambios que han generado las empresas forestales y otras industrias en el medio ambiente y ecosistemas de lo que hasta hace unas décadas era un espacio de una naturaleza privilegiada por cientos de esteros, vertientes, lagunas, y otros tantos caudales que abastecían de agua a los campos y bosques de estos lugares.
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